Para que un matrimonio sea feliz y duradero, es importante recordar con frecuencia los momentos felices que compartís como pareja y equilibrar en la balanza los contras de cada uno con los pros. Todo ello sin olvidarnos de que nadie es perfecto, ya que la mayoría de nosotros tenemos las costumbres, casi todas ellas seguramente inculcadas por la familia, y que pueden ser motivo muy frecuente por el que discute un matrimonio e incluso llega a divorciarse.
Casarse no significa que haya que olvidarse de los nuestros, pero si hay que tener en cuenta que tu decisión ha sido libre y voluntaria, y que nuestro objetivo principal es conseguir formar nuestra propia familia.
Una frase muy buena y que nos debe servir como ejemplo es la de “el que se casa, casa quiere, por lo cual lo mejor es vivir independientes”
Consejos para que vuestro matrimonio sea para siempre
Se sincero: La sinceridad es primordial en una convivencia, si algo no nos gusta no hay por qué callarnos, pero es un error si lo manifestamos de una manera desagradable. Hablando se entiende la gente y de esta manera, que es la justa, seguro que conseguimos lo que queremos.
Perdona: Pide a tu pareja que te ayude a buscar la solución a tus problemas, confía y sobre todo no te limites a oír, cuando el/ella esté hablando, deja lo que estés haciendo y mírale/a a los ojos. Empieza admitiendo en lo que te has equivocado, olvida el orgullo y el rencor, que nunca nos favorece, y pide perdón si es necesario. En el caso contrario, no entres en el círculo vicioso negativo, y perdona, será lo que mejor te haga sentir, dos personas que se quieren siempre tienen la opción de empezar desde cero.
Respeta: El respeto es importantísimo, nunca debemos criticarnos si estamos acompañados, pero mayor razón tendremos de no hacerlo, cuando uno de los dos no esté presente.
Invierte tiempo: En cuanto a la relación conyugal, haz sentir a tu pareja totalmente necesario en tu vida diaria. Dedícale tiempo pero sin confundir la calidad con la cantidad, hay que respetar el espacio y siempre es bueno pasar tiempo con otras personas.
Comunícate: La comunicación y la comprensión entre los dos es primordial para la relación de pareja. En una investigación se calculó que las parejas tienen una media de 17 minutos de conversación a la semana, y eso es sorprendentemente bajo, ya que la semana tiene 10.080 minutos. Así que es importante alejarse de la media, y aumentar ese tiempo de conversación.
Diviértete: No dejemos que nos invada la rutina, es muy importante salir de vez en cuando, da igual al cine que al teatro, una cena más cara o más barata, o un simple paseo. Se trata de dejar por unos minutos de lado las preocupaciones del trabajo, la familia o la casa y disfrutar recordando viejos tiempos, reviviendo la chispa del noviazgo, para mantener la ilusión por la relación.
Comparte: Por cierto, otro factor importante en la pareja es la economía, se dice que alegría compartida es doble alegría, y que tristeza compartida es media tristeza. Es decir, valoremos lo que significa tener a la persona que queremos a nuestro lado, en lo bueno y en lo malo, porque no es más feliz el que más tiene, sino el que menos necesita. Comentad y compartid vuestros motivos de alegría, tanto los individuales como los de la pareja, y lo mismo con los problemas y preocupaciones, si les buscáis soluciones entre los dos, las preocupaciones se harán un poquito más pequeñas y la pareja un poquito más grande y fuerte.
Complace: Ahora hablemos de las relaciones íntimas, uno de los pilares del matrimonio, hay que investigar sobre los gustos de cada uno, estamos para complacer e innovar. Si los dos sois generosos en este aspecto y no os dejáis llevar por la rutina, el matrimonio mantendrá la pasión y la fuerza por muchos años que pasen. Sorprender a nuestra pareja de vez en cuando nos servirá para sentirnos imprescindibles.
Cuídate: Seguir cuidándonos físicamente y seguir queriéndonos poner guapos para nuestra pareja, igual que cuando éramos novios, es siempre importante. No porque estéis casados ya tiene que ser algo indiferente, al contrario.
Se detallista: Y, por último, tened en cuenta las fechas señaladas, como los cumpleaños, la fecha en la que os conocisteis o el aniversario, procurando responder con un detalle, que no tiene por qué ser algo que cueste dinero.
Conclusión
Estos consejos están totalmente contrastados con matrimonios que han conseguido celebrar sus bodas de plata, e incluso, de alguno que ya ha cumplido las de oro, yo espero y deseo que todos los usuarios que lean este artículo logren llegar a sus metas.